Thinking of you.

Cierro los ojos e intento dejar la mente en blanco, no pensar en nada más que dormir y que sea un día nuevo lo antes posible.. pero solo lo intento, porque de forma inevitable sin saber por qué ahí esta de nuevo su sonrisa, dibujada perfectamente entre el dulce contorno de sus labios.. esa sonrisa que me hace poner cara de tonta sin darme cuenta...

lunes, 27 de junio de 2011

Un simple día...

Un simple día, para ser exactos, un 2 del mes Marzo del 2011 empezó todo.. ¿Un simple día? ¡Ja! Ingenua de mi. Un simple día es cuando no ocurre nada en especial, cuando sigues tu rutina como habitualmente, hasta podría decir que un simple día es cuando te tropiezas por la calle y ríes... sin saber que ese día pasará de ser un día más a ser el día que alegrará todos los demás.. Así pues como un día puede cambiar mi vida? Bien, todo es tan simple como conocer a la persona adequada en el momento adequado. Cómo de película, ¿Verdad?
Al principio no le prestaba mucho caso a esa nueva persona en mi lista de contactos. Nos presento una amiga, pesada amiga pensé en aquellos tiempos.. ahora no me cansaría de darle las gracias.
Mi primera impresión de él fue de un chico amable, agradable de conversar con esa persona, pero, nada más allá de una bonita historia de amistad, por ahora. Pasaban los días y hablabamos más, nos contabámos cosas de nuestros gustos y aspiraciones.. Pero nada más allá, en cierto modo no queria que fuera más allá, miedo tal vez. Miedo a que me guste lo que veía, y así era.
Un día se me despertaron unas ganas incontrolables de conocerle, de verle, de saber más cosas de él, es más de saberlo todo, de darle una oportunidad. Tal vez, esta cabezota de mi estuviera abriendo su corazón a una nueva persona, una nueva aventura, un nuevo comienzo hacia lo desconocido o simplemente a la felicidad.
18 de Abril del 2011, la primera vez que mis ojos pudieron contemplarlo, que pude tocarle, hablarle, saber que todo lo que me estaba pasando era realidad, sonreírle y descubrir que ya había encontrado la felicidad. Nunca olvidaré esa tarde en que nuestros brazos se encontraron, nuestras manos se conocieron y mis labios se volvieron adictos a los suyos. Nunca lo olvidaré porque aquella tarde una parte de mi se quedó con él. 




Andrea.                  

domingo, 19 de junio de 2011

6 de Mayo.


Seis, seis, seis, seis.. Un simple número que junto a un nombre de un mes y un año formarían una fecha, una fecha normal y corriente para muchos, pero en cambio el comienzo de una nueva vida para mi. Seis de Mayo del dos mil once, así es la fecha la cual está marcando mi vida y lo seguirá haciendo. Todo tiene que ver gracias a él. Si solo a él. Él , él y él. Él esa persona que me hace sonreír con namás escuchar su nombre, su voz... Él que cree en mi y me apoya cada día. Él que me enamora con su sonrisa. Él la persona por la cual late mi corazón. Dicen que las comparaciones son fáciles de hacer una vez has probado la perfección, bien, yo quiero quedarme con esa perfección siempre.

Él, así es él, es la persona por la cuál cada mañana me levanto con ganas de más, de vivir, de reír, de disfrutar, de correr riesgos, de hacer locuras, otra vez de reír.. sonrisas y sonrisas... ese tipo de sonrisas en las cuales no hace falta más que una sonrisa, una mirada.. o aveces tan solo un pequeño gesto en el cual me doy cuenta de que soy feliz, feliz de verdad junto a esa persona y que no quiero que acabe ese momento nunca, que nunca deje de abrazarme, besarme.. es como si siempre quisera sentirlo conmigo, quiero que forme parte de mi, si eso es.

Con él todo es diferente.. la manera de hablar, de pasar los días, de quererle. Ahora mismo no sabría describir como me siento a su lado porque simplemente no encuentro las palabras adecuadas para explicar tanta felicidad, tanta complicidad, tantas ganas de estar con él. Cuando estamos juntos podría decir que soy la persona más feliz del mundo, cuando me abraza y me besa juro que alcanzo el cielo, si lo alcanzo y lo toco con mis propias manos. Las mismas que le acarician a él y me hacen sentir tan bien como si no existieran las preocupaciones.. desaparecen así sin más, solo él y yo nadie más necesito para ser asi de feliz.

Algunas noches, bueno rectifico, casi todas las noches me acuesto pensando en él. Al igual que pasp las horas y los días. Él ocupa mi tiempo completamente. A veces me gusta recordar un hecho fugaz del pasado, un hecho junto a él, que sin saber porqué ese recuerdo ya queda atesorado en mi corazón por la gracia del momento, la ternura, la pasión... Se trataba de una tarde cualquiera, de cielo nublado y sol a momentos pero radiante, como tantas tardes que no habría de olvidar jamás, ni lo haré. El buen tiempo incitaba al sosiego y el descanso y la brisa fresca purificaba el ambiente. Nadie había a nuestro alrededor, en esa montaña alejados de la ciudad, de los ruidos molestos, de la contaminación, de la gente infeliz que se resignan cada día con su destino sin querer cambiarlo.. allí estabamos solo dos personas con ganas de quererse, de conocerse el uno al otro y enamorarse hasta que no sepas ni quien eres, de descubrir cosas nuevas, nuevas experiencias juntos. La recuerdo perfectamente. Su mirada, esos ojos marrones brillantes mirandome que hacen que quiera quedarme en ellos y no irme nunca de allí, que ese momento permanezca eternamente. Sin poderlo evitar le besé y automáticamente me transporte a un lugar muy lejos de allí, un lugar donde ojalá me quedará siempre, donde siempre soy feliz.. Sus besos son tiernos, a la vez con un toque de pasión, hace que no quiera irme nunca lejos de él, me enganchan.. lo tengo que admitir, son mi adicción. De repente me susurró cosas tiernas al oído y me besó suavemente por el cuello, no puedo más hace que me derrita. Aquella situación causó en mi una sonrisa espontánea, natural, sin malicia. No supe hasta mucho que aquello perduraría en mi mente como un bonito e irrepetible recuerdo.

Cada vez que lo recuerdo esbozo una tierna sonrisa sin proponermelo, como por instinto, y recuerdo por un instante el aliento de la felicidad. Oh dios, estoy sonriendo en estos momentos.. ¡Qué diablos! Soy muy feliz, y no me arrepiento de decirlo y de expresar mi felicidad. Ansio conocer su mundo y conocerlo a él tal y como es, su faceta cuando no hay nadie que lo juzgue, simplemente natural. He llegado a soñar con él en innumerables ocasiones. Pienso en sus manos entrelazadas con las mías, nuestras bocas desgastándose como dos enamorados empedernidos en un mar de caricias sin fin, dos almas ardientes que se aman en la deligencia de la juventud. Aunque sólo fueran sueños, sé que se harán realidad, es más, día a día se van haciendo de verdad. Y si esto es un sueño con él, simplemente hasta que despierte.. ¿Podemos hacer que dure eternamente? 

Curiosa palabra.

Curiosa palabra la vida. Palabra que abarca mucho más de lo que parece, de lo que podemos llegar a pensar nosotros los seres humanos; las personas. La vida tal y como la conocemos puede tener muchas comparaciones para definirla, para poder enterderla o simplemente para poder vivirla. Tal y como la conocemos si nos paramos a pensar podría compararse con un simple bosque. Sí, un bosque lleno de misterios, aventuras, nuevas experiencias, pero sobretodo recuerdos lejanos y vivencias que allí permanecerán. El bosque es como la vida, cuando empezamos adentrarnos en él es fácil de seguir avanzando, todo es nuevo. Como cuando somos niños pequeños, todas las cosas nos parecen increíbles, nos dejamos cautivar por las cosas más simples como una pequeña pompa de jabón o un simple pájaro revoloteando en su nido tranquilamente. En cambio todo se complica cuando avanzamos más profundamente en un bosque cada vez nos parece más oscuro, más siniestro, más difícil de entenderlo y seguir adelante en ese camino.. como cuando vamos creciendo y nos convertimos poco a poco en adolescentes todo se complica a nuestro alrededor, los estudios te parecen más difíciles, crees que no podrás afrontar todo lo que viene. Todo se complica cuando crecemos, los problemas aumentan, aquellas cosas que nos cautivaban de pequeño ahora solo son estorbos o meras tonterías que no nos importan, ya nada es como antes ahora ya estamos adentrados en este bosque sin salida, sin escapatoría. A medida que pasan los años nos vamos acostumbrando a esta estancia en el bosque a disfrutar de los placeres que nos proporciona día a día, de saber aprovechar cada cosa por muy pequeña que sea siempre será de gran valor, como por ejemplo cuando ya somos adultos nos hemos resignado a continuar y disfrutar al máximo todo, cada momento, cada instante.. Es la flor de la vida es la oportunidad de ser alguien, de volver a empezar, de rectificar los errores saviamente, de vivir. Pero como todo tiene su final, poco a poco empiezas a ver sentido a todo, a darte cuenta de todos los consejos ignorados, a aceptar que ya queda poco para salir de ese bosque. Poco a poco vas viendo la luz al final de ese oscuro y misterioso bosque, ahora ya te has dado cuenta de todo y sabes que ese es el final, al que todos estamos expuestos, el que todos sabemos que llegará. Así es, así sin darte cuenta ya has hecho todo el camino hacia el otro lado del bosque, ya has vivido tu vida, ya has cumplido tus sueños. Igual que en el recorrido de un bosque la vida también se acaba y debemos aceptar su final porque no hay marcha atrás, nadie a aprendido a ganar en este juego llamado “vida”.


                                                                                                                                                  Andrea.

Voy a ser feliz.


Lo notas en mi sonrisa, lo notas cuando me rio, lo notas todo sin decirte nada. No voy a estar triste nunca más. Tengo razones para sonreír y, ahora mas que me doy cuenta. Ahora me vengo a dar cuenta y prometo no hacerlo nunca más. Abro los ojos y sé que nada puede hacerme daño. Levanto la cabeza y me seco las lágrimas, pero si algun dia vuelvo a llorar espero que sea de felicidad. Sé perfectamente lo duro que es perder una batalla, pero ahora que todo esta arreglado no quieres volverlo a intentar. Sé muy bien lo que duele dejar alguien que amas. También sé muy bien que con decir "lo siento" no basta.. Pero tengo una razón por la qual sentirme contenta he retomado el control de mi vida y sigo viviendo.La vida es demasiado corta como para malgastarla de tal forma, ahora me doy cuenta. Voy a ser feliz.



                                                                                                                                            Andrea.